Un aneurisma es una protuberancia o abombamiento anormal en las paredes de un vaso sanguíneo, la cual se puede romper, causar un sangrado interno y a menudo provocar el deceso del paciente.
Por lo general pueden desarrollarse en varias partes del cuerpo como:
- La aorta: El vaso sanguíneo principal que transporta sangre desde el corazón a los órganos vitales
- La sección de la aorta que pasa a través del abdomen
- La sección de la aorta que pasa a través del pecho
- Vasos sanguíneos que suministran sangre al cerebro
- Vasos sanguíneos en las piernas, ingle o cuello
Aunque no suelen presentar síntomas, algunos pacientes pueden sufrir dolor en abdomen, brazo, espalda o pierna, también es común dolor de cabeza o sangrado.
¿Cómo se detecta la presencia de esta patología en el paciente?
Asistir a la consulta médica a tiempo será determinante para saber cuáles estudios debe realizarse la persona para identificar la existencia de un aneurisma; sin embargo, los exámenes más comunes para los casos frecuentes son:
- Aneurisma Cerebral:
- Angiografía
- Tomografía
- Aneurisma de la aorta abdominal:
- Examen físico
- Ecografía del corazón o abdomen
La detección anticipada es vital para evitar la ruptura del vaso sanguíneo, para lo cual el tratamiento dependerá de la ubicación, tamaño y el estado del aneurisma. También el médico de cabecera evaluará edad y salud general del paciente, antecedentes familiares y afecciones congénitas para determinar cuál es el procedimiento más adecuado.
Cuando el aneurisma está ubicado en el cerebro, puede usarse el grapado quirúrgico, la embolización endovascular o desviador de flujo para sellar el aneurisma y ayudar a evitar una rotura en el futuro. El profesional encargado de realizar este procedimiento es un neurólogo, junto a un neurocirujano o neurorradiólogo intervencionista.
Si esta patología se encuentra en la aorta, el tratamiento siempre es quirúrgico, hoy en día se puede optar por una cirugía abierta o endovascular.
En la cirugía abierta se abre el abdomen y se cambia la aorta afectada por una prótesis, mientras que en el procedimiento endovascular consiste en introducir desde la ingle una especie de stent o de muelles recubiertos para aislar la aorta afectada. Este procedimiento es menos agresivo.
El médico tratante determinará cual de estos dos procedimientos es el ideal para el paciente según las condiciones del mismo, ubicación y tamaño de la aneurisma.
El postoperatorio es fundamental para la pronta recuperación de los pacientes, contar con un servicio de enfermería profesional para el cumplimiento de las indicaciones médicas, la administración de medicamentos y servicio de laboratorio es clave para una evolución progresiva de su salud.
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